Amor a la camiseta

domingo, abril 30, 2006

Ya ganamos el primer torneo

Es cierto que no nos dieron ninguna copa, que no dimos la vuelta, y que la final se jugó a estadio casi vacío, pero los rojos el pasado viernes moralmente ganamos un campeonato. Y es que eso es cada clásico, un torneo, porque no importa que un equipo vaya primero y el otro noveno, los dos tienen las mismas posibilidades de ganar y de darle a su gente una alegría igual o mayor que la de un campeonato.
La cosa comenzó difícil para nosotros, porque a pesar de que en los tiempos recientes hemos sido superiores, en el minuto 30 estábamos abajo 0-1 y teníamos pena de que los cremas se encerraran a defender el resultado. Terminó el primer tiempo, y al igual que los jugadores, descansamos. El segundo tiempo lo comenzamos y terminamos con todo. Los doce dejamos lo que teníamos que dejar en la cancha y gracias al esfuerzo colectivo se logró empatar y dar vuelta al resultado.
El eterno goleador se encargó una vez más de poner las cosas en claro. Se encargó de dejar en claro que hay una diferencia abismal entre un equipo y once jugadores vestidos de blanco. La inocente (o tal vez estúpida) expulsión de De Mata nos hizo más fáciles las cosas. La Pandilla, que comienza a formarse, se unió con integrantes de La Caldera y La Trinchera, y armó una barra que no se calló y que poco a poco se fue haciendo más grande.
El momento más emotivo fue cuando el ídolo sale del juego en el minuto 80 y recibe la merecida ovación de la gente roja en la general norte, la tribuna, y el palco. No hay nada como ir a jugar de visitante y sentirse local. Podré haberle dado Q. 30 a la directiva crema, pero el gusto de despedir a su presidente en el minuto 80, el gusto de ovacionar a nuestro ídolo de visitante, el gusto de salir sin miedo porque me siento local, no me lo quita nadie. Salúd rojos, celebremos la docena!
PD: La foto la tomé sin permiso de www.prensalibre.com espero no meterme en problemas. Así, así, así gana el campeón!!!

miércoles, abril 26, 2006

Un gol de riñones

Se empató el juego de ida en la final de la copa pero eso es lo de menos. Es un mal resultado pues estamos obligados a ir a buscar el resultado a Jalapa y ellos podrán hacer su juego (aunque no se si lo que hacen se llame juego). Municipal logró hoy un empate milagroso en base al deseo, a la garra, al pulmón, a la mística, en fin: en base a riñones. Sí, esa es la palabra.
Cuando se corre una pelota inalcanzable, y cuando se juega con una fractura; cuando el rival tiene once jugadores (y un doceavo vestido de negro), y cuando tu equipo con diez aún teniendo dos expulsados; cuando el invicto está por caer y alguien manda a guardar una pelota en el minuto 92, se puede decir que se hizo un gol con riñones.
Un gol que no había forma de que entrara. Un gol que el buen trabajo del Chicotón Molina había impedido. Un gol que tal vez no había querido entrar solo para hacernos explotar de regocijo (no de alegría) justo al final. Un gol que manda un mensaje a todos aquellos que están haciendo lo humanamente posible por vernos abajo.
Con ese gol les decimos: sigan intentando porque Municipal se hace cada vez más fuerte. Pongan un rival con catorce jugadores porque Municipal tiene doce, y esos doce sí que aman a la camiseta. Sigan metiéndonos zancadilla porque nos seguiremos levantando. En fin: sigan intentando, que nosotros seguiremos diciéndoles: NO.

lunes, abril 24, 2006

Qué huele a clásico

Menos mal que la semana va a a estar ocupada y no vamos a comer ansias para que llegue el clásico. Eso sí, con los creadores de La Pandilla lo venimos esperando desde hace un mes. Será nuestro debut y queremos dejar una buena impresión y hacer una verdadera fiesta.
Que los cremas van de noveno? Me importa poco. Si nos ganan van a seguir de noveno pero nosotros vamos a estar amargadísimos. Nosotros queremos jugar el clásico porque lo queremos ganar. Sí, la última vez salimos contentos por no haberlo perdido, pero ahora ya no sirve más que la victoria. Por qué? Porque no puede ser que solo nosotros no le ganemos a los cremas!!!
No, ya en serio, es porque es un clásico y no importa quién va de primero y quién va de último. Lo que importa en realidad es ganar un clásico simplemente porque se juega contra el rival de siempre, así de sencillo. Como ya lo publiqué en un post anterior, es simplemente porque queremos ganarle al que más gusto nos da ganarle, al de la otra banqueta.
Se viene el clásico y lo único que importa es el juego. Las palabras, los títulos, las posiciones, la historia, y muchas otras cosas más quedan a un lado. Lo que importa es el juego y quien lo gane será quien tenga la ventaja temporal. Saludos pues y:
VAMOS ROJOS, VAMOS!!!

lunes, abril 17, 2006

Lloren patojos! Lloren!

Es lamentable, pero no nos queda otra más que aceptarlo. Una vez más Costa Rica se encarga de amargarnos la vida. Una vez más va uno de necio a ver los juegos de fútbol. Y para más fregar, una vez más uno se ilusiona. ¡Si tan fácil que hubiera sido que nos golearan! Pero no... Se encargan de ilusionarlo a uno y de repente en trancazo de vuelta a la tierra. ¡No puede ser! Si tan cerca que estuvimos, una vez más la señora fortuna jugó en contra de nosotros. Sí, comenzó a jugar contra nosotros cuando en el sorteo nos tocaron los ticos, ¿por qué no nos tocó El Salvador o Belice o alguno más facilito? No, tenía que ser Costa Rica. Luego el tiro que va al poste, y la otra pelota que pasa a un ladito en el minuto 90. Fortuna o no, creo que no fuimos dominadores, pero las pocas oportunidades nuestras fueron mucho más claras que las de ellos. En los penales, simplemente no los supimos patear.
Al final, se dio el resultado que pensé desde que se hizo el sorteo: Costa Rica clasifica, Guate se queda fuera. Pero siempre hay que jugar los partidos. Los muchachos mostraron algo que hace rato no veía en una selección juvenil. Mostraron carácter, mostraron que no se van a rajar en ningún lado a la hora de defender la azul y blanco. El Chino dio una gran muestra de manejo de grupo cuando se metió a la cancha a separar la bronca. Y no, no me molestó ver a nuestros muchachos en un conato de bronca jugando como visitantes. Demostró que están unidos y que van a apoyarse entre sí en cualquier circunstancia, eso sí: hay que saber salir de las broncas.
Por el momento estamos eliminados y si hay algo que me alegró, es ver a los muchachos salir llorando del campo. Sí, me alegró porque me muestra que dejaron todo en la cancha para ganar el juego. Cuando uno sale llorando del campo es porque no alcanzó el objetivo por el que tanto luchó, es porque simplemente uno hizo todo lo posible por ganar pero simplemente no se pudo. No hay más que decir, estoy orgulloso de esas lágrimas, así que ¡lloren patojos! ¡Lloren! Porque también es de hombre llorar, principalmente las lágrimas de amargura.

domingo, abril 02, 2006

Dando pasos de gigante

Como dice la canción de los Bacilos: cuando veo a Municipal "yo siento pasos de gigante". Y es que la forma en que el equipo se ha venido desempeñando en las últimas fechas le hace a uno sentir que está dando unas zancadas impresionantes con respecto al resto de seguidores. "La gran máquina roja" ha funcionado hoy casi a la perfección, y digo casi porque recibimos un gol y no convertimos todas nuestras oportunidades. Es cierto que jugamos con el último de la tabla y llamado a descender, pero hay equipos que se han complicado con la Antigua Guatemala y apenas le han podido ganar y otros hasta han perdido puntos; el Rojo no. El Rojo demostró que es el líder de la tabla del Clausura y de la acumulada y que por mucho es el mejor equipo de Guatemala.
Ahora se viene la copa y hay que ganarle a Xinabajul, porque con este equipo estamos para el doblete. Esto me tiene obsesionado ya que al no jugar Concacaf, la mayor alegría que podemos obtener es la de ganar los dos títulos locales; uno es poca cosa para nosotros. La alegría que nos envían los muchachos al observar su armonía, su entrega, su desgaste, su pasión, nos contagia y nos hace sentirnos cada vez más orgullosos de ser parte de esta institución. Sí, dije ser parte, porque al pagar nuestros boletos al estadio, al comprar nuestras camisetas y productos del club, estamos contribuyendo aunquesea con Q 1.00 para el sueldo del Pin, o del Coyote, o de Barril, o de Trossero. Sí, Municipal es grande en la cancha, pero también es grande afuera de ella.
Otras observaciones del fin de semana:
1. Como ya lo dije en una publicación anterior: Petapa no se va. Viene haciendo tremenda campaña y poco a poco va subiendo en la tabla, incluso está en puestos de clasificación.
2. No se si me da pena o risa ver a nuestros hijos jugando a las cucarachas: debajo de la tabla. Económicamente, cuánto les estará costando cada punto? Sigan gastando, sigan trayendo figuras que vienen a Guatemala a terminar sus carreras. Lo único bueno que les veo es que los viejitos (como ya nos llamaron ellos una vez, jajaja) se les lesionan y entonces les dan la oportunidad de jugar a los patojos.
3. Me dormí en buena parte del segundo tiempo del Barcelona-Real Madrid.
4. Como ya lo dije en otra publicación, el Pando se despertó y gracias a Dios me calló la boca, ojalá ahora no me la calle porque ando hablando maravillas de su juego.
5. Mis plegarias fueron escuchadas!!! Para quienes han seguido mis publicaciones desde octubre, en los grupos de Hi5, sabrán de qué estoy hablando. Gracias Colombia por esa inestabilidad!!! Vamos Don Óscar póngase las pilas y que el Bolillo se quede por mucho tiempo.